Impulsa la Secretaría de Gobernación múltiples
actividades artísticas en el Programa Nacional para la Prevención Social de la
Violencia
La música, el arte, es un instrumento de cohesión
social, afirma Miguel Ángel Osorio Chong, titular de esa dependencia del gobierno federal
Originalmente se integraron a la actividad artística como parte de un programa para reducir su condición de vulnerabilidad ante la
violencia y delincuencia de las ciudades donde residen.
Su camino llevó, el pasado domingo, a más de un menor
que forma coros infantiles y juveniles en Morelos, Michoacán y Coahuila a
presentarse en el Palacio de Bellas Artes.
En el máximo recinto cultural del país, el Coro
Orquesta y de Guitarras Suma de Voluntades, que integran 938 menores de 77
colonias vulnerables de Morelia, creado originalmente en 2013; el Coro de 50
niñas y niños de Cuernavaca, Morelos; el Coro Casa de la Música de Torreón,
Coahuila, formado por 90 integrantes, y el Coro de 88 menores deLa Piedad,
Michoacán, compartieron el programa artístico.
Constituyen el núcleo más avanzado de actividades
artísticas del Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia que
se impulsa desde la Secretaría de Gobernación (Segob) con una inversión, en
2014, de 438 millones de pesos.
Acciones en las 32 entidades
De acuerdo con el reporte del programa, participan como
parte de un conjunto de acciones contra la violencia, efectuadas en las 32
entidades del país que van desde la rehabilitación y construcción de centros
culturales hasta actividades formativas para el sector infantil y adolescente e
integración de orquestas y coros musicales.
El titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel
Ángel Osorio Chong, habló brevemente y sostuvo que la música, el arte, es
un instrumento de cohesión social.
Luego aludió a la especificidad de los intérpretes: “Sé
que hay muchas fundaciones que buscan talentos y que forman orquestas, coros.
Esta presentación tiene una gran diferencia. No se hizo a partir de un casting”,sino
para alentar una convivencia pacífica.
En entrevista, la encargada del despacho de la
Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana de Gobernación, Eunice
Rendón, subraya que, más allá de la relevancia que tuvo el concierto –el más
importante que han dado las orquestas surgidas de este programa en todo el
país–, “lo que valoramos principalmente es el impacto que ha tenido en la parte
sicosocial de los niños.
Son menores que han tenido situaciones muy complejas,
en algunos casos, por su entorno; hasta en algunos casos extremos se ha llegado
a tentativas de suicidio. Este esquema, sustentado principalmente en la
disciplina que involucra una orquesta musical, permite darles oportunidades de
desarrollo y de inserción social.
Y cita el caso de Andrea, joven de Michoacán, que
experimentó situaciones muy complejas y difíciles. En principio siempre vestía
de negro y era retraída. Hoy es una de las principales participantes del coro
capelino.
El concierto del domingo fue colofón de un conjunto de
actuaciones de las orquestas, entre otras, del coro de Morelia, el que tiene
más integrantes. Presentaciones en el Festival Internacional Cervantino, giras
estatales y un concierto previo conjuntamente con los 3 mil 200 menores que
participan en todas las orquestas en el ámbito nacional, efectuado en el Parque
Bicentenario, en la capital michoacana, fueron el preámbulo de una petición de
Natalia, corista de Morelia, quien solicitó a Osorio Chong auspiciara la
realización de un concierto en Bellas Artes.
Originalmente se integraron a la actividad artística
como parte de un programa para reducir su condición de vulnerabilidad ante la
violencia y delincuencia de las ciudades donde residen.
Su camino llevó, el pasado domingo, a más de un menor
que forma coros infantiles y juveniles en Morelos, Michoacán y Coahuila a
presentarse en el Palacio de Bellas Artes.
En el máximo recinto cultural del país, el Coro
Orquesta y de Guitarras Suma de Voluntades, que integran 938 menores de 77
colonias vulnerables de Morelia, creado originalmente en 2013; el Coro de 50
niñas y niños de Cuernavaca, Morelos; el Coro Casa de la Música de Torreón,
Coahuila, formado por 90 integrantes, y el Coro de 88 menores deLa Piedad,
Michoacán, compartieron el programa artístico.
Constituyen el núcleo más avanzado de actividades
artísticas del Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia que
se impulsa desde la Secretaría de Gobernación (Segob) con una inversión, en
2014, de 438 millones de pesos.