Los prototipos fueron desarrolados por el Cinvestav en
colaboración con expertos en Francia, con los que tiene convenio para que estudiantes e investigadores viajen en ambos sentidos
Pequeños vehículos aéreos y acuáticos no tripulados y
prótesis robóticas creados por especialistas del Centro de Investigación y Estudios Avanzados se exhiben desde ayer en la exposición Drones, submarinos y
exoesqueletos. Unión franco-mexicana en el Cinvestav, en el Museo Túnel de la
Ciencia del Metro La Raza.
La muestra reúne infografías, fotografías y prototipos
de los sistemas autónomos de navegación aérea y submarina generados en la
Unidad Mixta Internacional-Laboratorio Franco Mexicano de la Informática y
Automática (Umi-Lafmia), alojada desde 2008 en ese centro.
“Lo que van a encontrar son los prototipos que
desarrollamos en nuestro laboratorio franco-mexicano que tienen una interacción
entre Francia y México muy fuerte, estudiantes e investigadores hacen viajes en
ambos sentidos”, informó Sergio Salazar Cruz, coordinador de la Umi-Lafmia.
Durante la inauguración Salazar Cruz estuvo acompañado
de Jorge Gaviño Ambriz, director general del Sistema de transporte Colectivo
Metro (STCM), y Benjamín González Pérez, responsable del Museo Túnel de la
Ciencia.
Dicha exposición, que tiene como objetivo divulgar el
trabajo de posgrado especializado en drones que desarrolla el Cinvestav, estará
abierta al público hasta el 30 de septiembre y es totalmente gratis, añadió
Salazar Cruz.
Informó que en la actualidad los drones se están
aplicando en la reconstrucción 3D de lugares que no pueden ser observados a
nivel de piso, debido a que estos vehículos pueden alcanzar alturas hasta de
300 metros.
Asimismo, son usados en la vigilancia aérea, medición
de contaminantes, recolección de datos, así como en la información de cobertura
de comunicaciones, entre otros.
Salazar Cruz también destacó en el área vehículos no
tripulados, sumergibles y aéreos, los de inmersión que sirven revisar ductos
marinos de Pemex, ya que estos sitios representan riesgo para la vida de los
buzos por su profundidad.
Robótica médica
La sección dedicada a los exoesqueletos presenta
estructuras, integradas por músculos hidráulicos externos al cuerpo humano,
“que permiten sostener, caminar o aumentar la fuerza y resistencia de las
personas con problemas de movilidad”, explicó el experto del Cinvestav.
Una de las misiones de la Umi-Lafmia, destacó, es
incidir en la solución de problemas de la sociedad, como la falta de movilidad
que pueden sufrir algunas personas, por lo que además de los drones el
Cinvestav también trabaja en el desarrollo de exoesqueletos.
Salazar Cruz comentó que a pesar de que han establecido
contacto el Centro Nacional de Rehabilitación ahí todavía no contemplan usar
esa tecnología. “Por nuestra parte estamos haciendo prototipos baratos para que
la gente los pueda usar”.
Cabe destacar que en México, según el censo de 2010 del
Inegi, 5.7 millones de personas padecen algún tipo de discapacidad, siendo la
limitación de la movilidad la de mayor frecuencia.
El especialista dijo que para esa tecnología aún no
tienen un costo calculado, pero destacó que “en Japón la renta por una hora en
un hospital va desde mil dólares”.
Reglamentación aérea
En México, comentó Salazar Cruz, la reglamentación para
el uso de drones entró en vigor el año pasado, la cual exige que no se vuelen
esos artefactos en áreas públicas pobladas y que tanto la nave como el piloto
estén certificados, entre otras cosas.
Sergio Salazar subrayó que, precisamente por
legislaciones, Estados Unidos prohibió exportar drones para evitar su uso en
actividades ilícitas y China hará lo mismo, “eso nos obliga a desarrollarlos”,
comentó.
El coordinador de la Umi-Lafmia informó que para
mejorar el desarrollo de esa tecnología en el país el Cinvestav tiene un
posgrado en la materia desde 2008, del cual han egresado dos generaciones.
“Lo que pretendemos con la maestría es formar recursos
de alta calidad, que puedan crear una empresa o continuar con la ciencia,
porque detrás de todos estos prototipos hay una investigación seria”.
Informó que tres de los egresados ya fundaron una
empresa de drones, otros dos se van a Francia y otros hacen el doctorado. Sobre
la oferta académica, destacó que “hay algo similar en Estados Unidos y en
Francia (donde está la filial de la Umi-Lafmia) y creo que nada más”.