jueves, 12 de noviembre de 2015

Legalizar drogas no ha sido una política fracasada: Froilán Enciso

 “México se atrevió a actuar como Estado  verdaderamente soberano, y por razones muy  válidas, el gobierno del presidente Lázaro Cárdenas  legalizó el consumo de las drogas al final de la  década de 1930”, recalca Lorenzo Meyer cuando  habla sobre el libro “Nuestra historia narcótica.

 Pasajes para (re)legalizar las drogas en México”, de  Froilán Enciso y que se presentará este viernes en el  CUCSH plantel Belenes.






La invitación la hace el coordinador del doctorado en Humanidades del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, Marco Aurelio Larios, quien precisa que la presentación se realizará a las once de la mañana en la Sala de Juntas  2, del edificio “C”, en Belenes.

Froilán Enciso, quien nació en Mazatlán, Sinaloa, en 1981,  es historiador y periodista. Tiene una licenciatura en relaciones internacionales por El Colegio de México y es candidato a doctor por la State University of New York-Stony Brook, en los Estados Unidos.

En este libro, publicado por Editorial Debate, “provee las claves definitivas para entender las conexiones globales entre el narco, la política mexicana y sus efectos, intercaladas con diversos recuentos históricos sobre la prohibición, el consumo de drogas y la inevitable legalización”.

De acuerdo a la ficha técnica, esta obra “se dirige a combatir la idea de que la legalización de las drogas ha sido una política fracasada”.

Froylán Enciso “halla testimonios del éxito de la legalización en reducir la violencia y disminuir las ganancias de los traficantes de diversas épocas. En el otro extremo, explica, la guerra contra las drogas es una opción cuyo infortunio provee suficiente evidencia para rechazarla tajantemente”.

Los capítulos del libro “se articulan como alegatos a favor de la ruina de las estrategias punitivas contra las drogas prohibidas. Al mismo tiempo, expresa el sentimiento de desamparo en que el narcotráfico ha dejado al país”.

Lorenzo Meyer, escribe en el prólogo del libro que “este vistazo panorámico a más de un siglo de historia de los narcó­ticos en México y encapsulado en las casi tres decenas de ‘pasajes’, recurre lo mismo al ensayo y a los documentos que a la observación directa, a la entrevista y a las aportaciones de otros autores, como el narrador (y general) Francisco L. Urquizo o el periodista Fernando Ramírez de Aguilar”.

Agrega que “el autor sustenta que desde el inicio fueron las ‘familias notables’ de Sinaloa las que con­trolaron la producción y la exportación del opio, y de ahí saltaron a la mariguana, la cocaína y al resto de las sustancias que hoy comercian los cárteles”.