De acuerdo a las redes de albergues y a encuestas levantadas por el Colegio de la Frontera Norte, el flujo de migrantes que mayor crecimiento han tenido desde 2009 a la echa es del de hondureños, quienes han elegido rutas distintas a otros grupos de centroamericanos como los salvadores y guatemaltecos.
Los motivos de migración son factores de violencia o económicos, la mayoría, “gente que se mueve en calidad de trabajadores internacionales”.
Así lo señaló la doctora María Eugenia Anguiano, investigadora del Colegio de la Frontera Norte, durante el Foro de Reflexión Migración en Tránsito por México, realizado este jueves en el auditorio Adalberto Navarro Sánchez del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la UdeG.
En cuanto a su destino, dijo la investigadora que los hondureños tienen redes mucho más consolidadas en Estados Unidos, mientras que de los guatemaltecos muchos se quedan en Chiapas y los salvadores tardan más en llegar pero también tienen ya redes más consolidadas.
“Mayoritariamente son poblaciones en las etapas más activas de la vida productiva y reproductiva, lo que significa que son, con mucho, migrantes laborales es decir gente que va buscando trabajo, que se desplaza porque no tiene oportunidades económicas, de empleo, trabajo de autoempleo o de trabajo informal”, explicó.
Con un cuadro comparativo de migrantes hondureños entre 2012 y 2013 que exhibió durante su ponencia, María Eugenia Navarro mostró un crecimiento en el grupo de niños y de jóvenes, “quienes son más vulnerables que las personas de mayor edad”.
Dijo también que lo mismo pasa en el grupo de hondureños y salvadoreños, con un crecimiento de niños y jóvenes, “aunque menos pero que ya son visibles”.
Con datos del Instituto Nacional de Migración, la investigadora trajo el caso de los niños migrantes de 2014, “los niños que el INAMI capta son muchísimo menos que los niños que comienzan a captar a partir del dos mil 12 las autoridades de Estados Unidos, entonces se están acoplando, esos niños tienen una red que los lleva hasta arriba, los capturan lo estadounidenses y los devuelven” a su país de origen, pero ya existe un crecimiento comprobado.
En cuanto a las rutas, dijo, el flujo más antiguo es del de migrantes guatemaltecos que cruzan por el centro de nuestro país, mientras que los hondureños cruzan por los estados del golfo de México para ingresar al estado de Texas, a pesar de los problemas de violencia, inseguridad y crimen organizado que viven en esa ruta, y lo salvadoreños tienen la ruta de alcanzar Tijuana y Mexicali, por Sonora, que es las ruta más antigua.
En el foro también participaron María del Carmen García Aguilar, del Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica; Daniel Villafuerte Solís, también del Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica, y Heriberto Vega, doctorante de Ciencias Sociales por la Universidad de Guadalajara.
El foro fue organizado en coparticipación del Centro de Atención al Migrante FM4 Paso Libre.
