México ha signado la
mayoría de tratados internacionales en materia de protección a derechos humanos
y el gobierno se empeña en hacérnoslo creer.
Sin embargo, la Corte de
Justicia y el Consejo de la Judicatura Federal poco han hecho por los usuarios
que tienen alguna capacidad diferente, me refiero a los sordos y a los ciegos,
los cuales deben contratar un intérprete o esperar que un familiar o persona
los apadrine para ejercer sus libertades, sin ello su derecho de acceso
inclusivo a la justicia es denegado, dado que muchos de los letreros o mensajes
públicos no están escritos en lenguaje para ciegos o sordos, siendo reitera la violación a la dignidad de ese sector vulnerable. Incluso en varias partes de
la República mexicana hay problemas de acceso a servicios públicos.
En el ámbito educativo la
Secretaria de Educación Pública debe vigilar con más detalle que el derecho
humano a una educación inclusiva se cumpla eficazmente en universidades
públicas o privadas, en efecto, son pocos los exámenes de admisión
idóneos para ciegos o sordos y su aplicación muchas veces queda en alguien que
improvisadamente lee las preguntas al ciego o permite el acceso a un familiar
del sordo para que medianamente traduzca un examen con tecnicismos que
difícilmente encuentran significado en señas, siendo ese el problema más agudo,
pues las medidas a favor del sordo en niveles de educación superior son
deplorables o inexistentes, por ende, México poner más atención en el acceso
inclusivo a la justicia y a la educación de ciegos y sordos.
Hace algún tiempo el
Instituto para la Protección de los Derechos Humanos promovió amparo para
reclamar atentados a la educación inclusiva de sordos por parte de
universidades que no tienen infraestructura adecuada, no obstante, el amparo se
perdió porque el Juez consideró que habían cesado los actos reclamados al
haberse emitido otra convocatoria de ingreso universitario; y ello es
congruente a la actividad ordinaria e indiferente de los juzgados donde no existe
personal capacitado para atender cabalmente a un sordo; lo curioso es que a un
extranjero lo atiende un perito poliglota ¿y al sordo? ¿Nadie? ¿A caso el Poder
Judicial Federal no tiene presupuesto para contratar intérpretes de señas? ¿Qué
pasa con las instancias encargadas de advertir ese tipo de violación como son
la Comisión Nacional de los Derechos Humanos-CNDH y el Consejo Nacional para el
Desarrollo y la Inclusión de Personas con Discapacidad-CONADIS? No tienen
presupuesto para analizar esos temas o no son enérgicas y nadie les hace caso o
¿será que por cuestión de competencia se hacen de la vista gorda y avalan la
violación a derechos humanos? No creo que eso sea posible en nuestro país o sí.
Necesitamos mayor
honestidad social y gubernamental para atender temas elementales en nuestro
desarrollo y derecho a conocer la verdad.
Necesitamos mayor voluntad creativa y respeto social a nuestros derechos y libertades, de lo contrario un país en bajada ¿ahora irá en picada? La sociedad está cansada de la cara amable de la ayuda aparente. Hagamos consciencia y dejemos de ser indiferentes.
Necesitamos mayor voluntad creativa y respeto social a nuestros derechos y libertades, de lo contrario un país en bajada ¿ahora irá en picada? La sociedad está cansada de la cara amable de la ayuda aparente. Hagamos consciencia y dejemos de ser indiferentes.
Enrique Carpizo